6 frases (y un poema) de Virginia Satir sobre "volverse más plenamente humano"

Por Luz Virginia Bueno

Cuando me encontré con un documento de Virginia Satir (ni siquiera era uno de sus libros) inmediatamente conecté con el contenido, porque es mucho de lo que trata este blog. Su filosofía era: "Volverse más plenamente humano". Vivir mejor. de relacionarnos mejor, de hacernos valer, de cuidarnos, de tomar decisiones valientes. Por eso es necesario nutrirse de contenidos como los de esta experta en trabajo social y psicoterapia que, aunque falleció en 1988, siguen más vigentes que nunca; porque a medida que las personas nos exponemos a los contenidos en las redes sociales, la valía disminuye y hasta se puede caer en depresión si no se tiene claro que el valor de un ser humano va más allá de lo que se puede ver.

Virginia Satir era estadounidense, realizó diversas investigaciones y escribió varios libros enfocados a la familia, entre ellos: Terapia Familiar paso a paso, En contacto íntimo, Autoestima, Vivir para amar, entre muchos otros. Publicó su primer libro en 1964. Su reputación creció con cada libro subsecuente y viajó por el mundo entero describiendo sus métodos.

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Para Satir, el cuidado y la aceptación eran elementos fundamentales para ayudar a los demás a enfrentarse a sus miedos y facilitar así que puedan abrir sus corazones a otras personas. Sin duda, percibía el amor con un mayor potencial sanador en la terapia.

Estas son 6 de sus frases:

La vida no es lo que se supone que debería ser. Es lo que es. La manera en que lidias con ella es lo que marca la diferencia

"No debemos permitir que las percepciones limitadas de otras personas nos definan"

“Necesitamos 4 abrazos al día para sobrevivir, 8 para funcionar y doce para crecer”

El pensamiento de Virginia Satir continúa vigente, la psiquiatra Marián Rojas Estapé también hace énfasis en la terapia de los abrazos como generadores de oxitocina una sustancia vital para el bienestar emocional que todo el mundo necesita para fortalecer sus relaciones. También es un excelente medio de comunicación (a veces las palabras sobran) y una maravillosa forma de dar amor a las personas.

«Quiero poder amarte sin aferrarme, apreciarte sin juzgarte, encontrarte sin agobiarte, invitarte sin insistencia, dejarte sin culpabilidad, criticarte sin censurarte, ayudarte sin disminuirte. Si quieres concederme lo mismo, entonces realmente podremos reunirnos y ayudarnos a crecer mutuamente».

“En todo el mundo no hay nadie exactamente como yo, aunque hay personas que tienen partes que se parecen a mí. Por lo tanto, todo lo que sale de mí es auténticamente mío, porque yo solo lo elegí”